La crueldad es algo que no está bien. Por ejemplo, hacerle mucho daño a alguien y no sentir pena.
Solveig, 7 años
El anterior taller sobre “Mundo cruel” dirigido a niños y niñas de entre 7 y 11 años proporcionó una base sólida para tratar los conceptos del bien y del mal. Un taller en el que se centró en las tarjetas de Filosofía visual de Wonder Ponder basadas en el tema «Mundo cruel».
La dinámica desafiaron a los niños y niñas a discutir sobre las elecciones y las consecuencias de nuestras acciones. Se habló de crueldad, de respeto, de acosadores, victimas y responsabilidad, desde diversas preguntas y analizando varias situaciones y planteamientos -como veremos más adelante-. A través del humor, la intriga, el rigor y el cuidado se diseñaron plantillas de Filosofía Visual al estilo Wonderponder.
Si un amigo te dice de hacer cosas malas, no puede ser un amigo.
Marc, 11 años
(cuando aparece un + es la facilitadora la que interviene, el – son los y las participantes)
Actividad de inicio:
Como actividad de inicio se propone una serie de Dilemas relacionados con el tema que nos incumbe y la ética. El primer dilema que se expone y que nos llevará más de 10 mínutos es el Dilema del Tranvía, un experimento mental en ética, pero haciendo algunas modificaciones con respecto al original.
¿Debo sacrificar una vida para salvar tres? Imagina un tranvía desbocado y sin frenos que se dirige hacia 3 trabajadores de unos 50 años que están en la vía. No puedes avisarles y tampoco puedes parar el tren, pero sí puedes accionar una palanca que lo desviará hacia otra vía. Allí hay un niño de 3 años, solo. ¿Debes apretar la palanca?
-Creo que lo mejor es que frene el tranvía.
-No puede, va sin frenos. Yo pienso que es mejor dejar morir uno, aunque tenga 3 años a que mueran 3 personas adultas.
-No estoy de acuerdo. Es mejor que mueran las 3 personas adultas, el niño tiene mucha vida por delante.
-Claro el niño puede elegir aun una vida, tiene que descubrir sus pasiones. Los otros ya lo han hecho, seguro que han tenido una vida buena. En cambio, el niño aun no podido tener esa vida que no ha vivido.
– Yo pienso que es mejor dejar que muera uno, el niño, porque si luego la empresa del tranvía tiene que pagar a una victima. Mejor pagarle a una que no a tres. Si tiene que pagar a tres, la empresa se puede arruinar y tendrá que cerrar, si cierra, muchos trabajadores se irán a la calle y se volverán pobres.
-Pero es que seguro que esos trabajadore que se quedan en la calle, pueden encontrar otro trabajo. Por eso no estoy de acuerdo en lo que has dicho. Creo que es mejor dejar morir a los tres, no solo porque son mayores y ya han vivido una vida, sino porque somos muchas personas en el mundo, si mueren tres que ya han vivido media vida no va a ver una gran diferencia.
-Sí, mejor dejar que mueran los tres. La vida de un niño vale más que la de un adulto.
Explicamos de nuevo que se trata de un dilema moral con un ejemplo cotidiano
+ Un dilema es como cuando tienes que elegir entre dos opciones y ambas parecen ser buenas, pero también tienen cosas malas. Imagina que tienes un examen importante mañana, pero también tienes muchas ganas de jugar con tu Nintendo. Si juegas, te divertirás mucho, pero quizás no te quede suficiente tiempo para estudiar y obtener una buena nota en el examen. Por otro lado, si decides estudiar en lugar de jugar, podrías sentirte más preparado y seguro para el examen, pero te perderías la diversión de jugar con tu Nintendo. Es un dilema porque tienes que elegir entre hacer algo divertido ahora o prepararte para un examen en el que tendrás una buena nota. ¡Eso es un dilema! Es como hacer malabares tratando de equilibrar lo que quieres y lo que es mejor para ti.
–Ester, antes de cambiar de dilema, ¿Puedo decir la última cosa? Yo pienso en el niño de 3 años, me pongo en su piel. Pienso que yo podría ser ese niño de 3 años. Yo he tenido 3 años, no he tenido 50. Yo he vivido hasta las 11, si yo estuviera en esa vía, no habría vivido todo lo que he vivido. Han sido años de mucha felicidad, lo he pasado muy bien desde los 3 hasta ahora. He jugado y sigo jugando. De adulto, ya no se juega tanto, la vida es de otra manera. Yo salvo al niño de 3 años. Porque le quedan muchas cosas por vivir, por descubrir. Si yo fuese ese niño, no estaría vivo. El niño merece vivir.
Después de exponer este dilema y darlo por cerrado. Empezamos “el juego de la empatía“. En este juego cada uno de los participantes saca un papel y lee en voz alta lo que aparece en ella. Todos son situaciones que pueden ocurrir en el día a día y que en grupo debemos reflexionar una solución. Algunas de las preguntas que deben responder son: ¿Qué harías tú en la misma situación? ¿Cómo crees que se siente la persona involucrada? ¿Qué podríamos hacer para ayudar a esa persona?. Algunos de los dilemas han sido:
No podemos no hacer nada si vemos una injusticia como esa (que un niño intimide a otro)
Martín, 9 años
- María está jugando en el parque cuando ve a un niño nuevo que parece solo y triste. ¿Qué debería hacer María?
– Pues me acercaría a él y le preguntaría si le gustaría jugar conmigo.
– Como yo soy un niño que trae alegría y felicidad al mundo, entonces le contaría un chiste o haría el payasete para que se riera y después le preguntaría si le gustaría que jugáramos a algo juntos. - Pablo está en clase y ve cómo un compañero está siendo intimidado por otro niño. ¿Cómo podría ayudar Pablo a su compañero?
-Buscaría al profesor y se lo contaría.
-Sí, pero después pueden meterse contigo por chivarse, y entonces te hacen eso a ti.
-Pues entonces, les digo que le deje en paz y que se vaya.
-Pero, entonces puede ir contra nosotros si protegemos al otro niño.
+ ¿Entonces qué pensáis? ¿Es mejor no hacer nada y no tener ningún tipo de consecuencias o hacer algo aunque las consecuencias sean malas para nosotros?
-Creo que es mejor hacer algo, aunque después nosotros seamos acosados, podemos buscar soluciones contándoselo a los adultos, y que nos ayuden. Pero no podemos no hacer nada si vemos una injusticia como esa (que un niño intimide a otro). - Martín encuentra un insecto atrapado en una telaraña. ¿Cómo podría ayudar Martín al insecto? (Desde mi punto de vista ese ha sido un dilema muy rico en cuanto a diálogo y la defensa de la propia opinión)
–Salvo al insecto, pobrecito.
-Yo destrozo la telaraña, me dan asco las arañas.
-No, no hay que salvarlo. Porque después la araña iría a por otro insecto.
-Es que yo salvo la vida del insecto.
-Pero que ¡No!, que no podemos salvar la vida del insecto. ¿Por qué debemos salvar la vida de ese insecto y no de otro insecto? El próximo que vaya a coger. Es que es la naturaleza, las arañas comen insectos y las personas animales. Entonces debemos salvar a los animales que se comen los humanos y destrozar las cosas de los humanos. ¡No podemos salvar al insecto! Hay que dejar la araña. (Mariella 10 años)
-Yo creo que hay que salvar al insecto. Es más importante la vida que la casa. No hay que matar la araña. La araña se puede construir otra casa rápidamente. El insecto no puede vivir otro vida.
-Pero, entonces cogerá otro insecto.
-Ya, pero yo salvo al que veo, lo que no veo no puedo salvar. - Roberto y su amigo están en la tienda de dulces cuando su amigo le ofrece robar algunos caramelos sin que nadie los vea. ¿Qué debería hacer Roberto?
–Obviamente no robar. Puedes ir a al cárcel y pasar toda tu infancia en al cárcel no tiene que estar chulo.
-Yo lo robo, porque es mi amigo. Y a los amigos siempre hay que ayudarlos.
-No, no siempre. En este caso no. Porque es para hacer algo malo. Si un amigo te dice de hacer cosas malas, no puede ser un amigo.
-Claro, es mejor ser bueno y no tener un mal amigo.
La actividad de los dilemas ocupo mucho tiempo, más del previsto. Estaban totalmente sumergidos en ellos. Una actividad que les gustó mucho y que hacían por primera vez. Proponen seguir con dilemas. Pero se deja esta idea para otro taller.
Pasamos a la segunda parte del taller. Antes de iniciar con el proceso de «Filosofía Visual» de WonderPonder para que finalmente, los niños y niñas pudieran crear sus propias tarjetas de Wonderponder.
Diseñamos un diagrama para simplificar los conceptos que se encuentran alrededor de la crueldad.
Buscamos en el póster que acompaña <<Mundo Cruel>> algunos de los conceptos que giran entorno a la crueldad y que se han conceptualizado en el diagrama con preguntas:
+¿Cuántos agresores ves?
+¿Quién crees que tiene más poder?
+¿Qué victima te da más pena?
+¿Hay algo o alguien ayudando a un amigo/a?
+¿Los agresores eligen ser crueles?
+¿Dónde hay una intención para hacer alguna crueldad?
+¿Los que se limitan a mirar sin intervenir son también responsables?
+¿Cuál os resulta la más cruel?
Reacciones, aportaciones y cuestiones:
Todos se ríen al ver el póster. Les resulta muy gracioso.
+¿Por qué os resulta gracioso?
-Porque está muy bien pintando.
-Porque es un mundo que no existe.
+¿Es graciosa la crueldad?
-Es graciosa cuando no es real, como en el póster.
– Es normal que el bebé tenga tanto poder. No solo porque es más grande si no porque cuando llora siempre están los adultos con él para ver qué pasa. Aquí aparece como agresor, pero no es un agresor, es solo que necesita del adulto.
-Claro, además el bebé no puede ser agresor. Ser agresor es ser cruel, un bebé no puede elegir aun ser cruel, porque no sabe hablar ni nada.
-Pero esta de aquí es muy graciosa. El pez tiene poder, y el otro tiene la intención de tener más poder robando o pescando el dinero.
Lorena, 8 años
Algunas de las preguntas trabajadas con algunas respuestas:
+¿Crees que los castigos son crueles?
-Solo son crueles cuando no son justos
-Un castigo no es justo cuando alguien sufre. Por ejemplo si se le castiga gritando o pegando. Eso es un castigo cruel. Pero si te castigan por ejemplo sin jugar a al Nintendo, ese no es cruel. Hay sufrimiento porque no puedes jugar, pero nadie te hace daño. Solo te fastidias un poco.
+¿Has tomado alguna vez sopa de gato? ¿te parece cruel?
-No he tomado, sopa de gato, pero he tomado otras sopas como de Jamón o pollo. Comer gato es igual que comer otro animal. Hay países que no comen cerdo, y pueden pensar que somos crueles por comer Jamón. Pero ellos también lo son si comen otro animal.
No es cruel. Es cultura. A la niña no le gusta la sopa de gato, pero tampoco le puede gustar la sopa de pollo. ¿Es menos cruel comer pollo?
Nora, 7 años.
+¿Pueden ser crueles los animales?
Los animales no son crueles. Ellos cazan por supervivencia. No piensan en “no voy a cazar a este animal porque me da pena”. Ellos piensan “voy a cazar a este animal porque tengo hambre y lo necesito para sobrevivir”.
Mariella 10 años
+¿Cuando deja de ser un juego y se convierte en crueldad?
Cuando alguien sufre, como el bebé. Solo es un juego cuando todos se divierten.
Nico, 7 años
+¿Qué harías en una escena así?
-Pido ayuda a los adultos y si no me hacen caso, intento quitar las manos de esos niños.
-Intento pedir ayuda a otros niños. No podemos dejar que esas cosas pasen. Debemos defendernos. Si un día tenemos un problema como ese, también queremos que nos ayuden.
-Claro, sobre todo queremos que nos ayuden, porque nosotros podemos tener problemas por ayudar a la niña.
+¿Te parece cruel la escena? Si la hormiga hubera mordido la niña ates, ¿tendrías la misma opinión?
–Claro que es cruel. Está matando por diversión.
-No, nodeberiamos matar a una hormiga porque haga daño. Si Matamos a un hormiga porque hace daño, también deberíamos matar humanos que daño a las hormigas. O a humanos que hacen daño a otros humanos.
-No, eso no se puede. No podemos aplicar “Ojo por ojo, diente por diente”. Si lo hacemos el mundo se queda ciego. (reproduce lo que se trabajó en el taller sobre Acoso Escolar) Sea lo que sea, porque te hagan daño no puedes matar. No tenemos derecho de quitarle la vida a ningún ser vivo por diversión ni por justicia.
-Solo, podemos quitar la vida por supervivencia. Si es por supervivencia, como para comer, sí que podemos quitar la vida. Aunque sea cruel, pero en este caso menos cruel.
Ultima parte: Crea tu propia escena.
Piensa en una escena específica que represente el tema de la crueldad. Luego piensa en las preguntas:
Debido al tiempo, lo que hicimos fue interpretar las imágenes de los compañeros. Pero fue la imagen del tiburón en la que los y las participantes quisieron centrarse:
+¿Quién es más cruel en la escena?
Fue debatida y dialogada, porque ante al pregunta quien o qué es más cruel. Dudaron si era el tiburón o el ser humano que estaba pescando. Tenían claro que la victima principal era el pez, pues el tiburón a pesar de ser pescado, iba a comerse al pez. Que por cierto, el tiburón es pescado por casualidad, no había intención de pescarlo. Porque con un caña no se puede pescar un tiburón.
El tiburón y el ser humano son los agresores en cualquier caso. Eso lo dejaron claro. Pero el problema estaba en que si el ser humano pescaba por placer o diversión, o si pescaba para alimentarse. Si era el primer caso, el más cruel de todos es el ser humano porque: “Matar por diversión es muy cruel”, en cambio, “Matar para comer no es cruel, porque busca tu propia supervivencia”.
Llegan a la conclusión de que el ser humano, al ser un animal que piensa y que está muy desarrollado, es el más cruel, porque mate o no por diversión. La manera de matar de pescar es cruel, porque significa tener una muerte lenta.
Tener un muerte lenta es muy cruel, y el ser humano, al pescar el tiburón, está provocando la muerte lenta. En cambio el tiburón, si se come el pez, es una muerte rápida. Por lo tanto, el hombre de la barca es el más cruel.
Actividad de cierre:
Relacionar una imagen de sentimientos con las sensaciones que han experimentado durante la sesión:
-Tristeza y rabia, porque no entiendo cómo puede haber tanta maldad en el mundo.
-Tristeza, porque cuando hay crueldad, hay una víctima, alguien que sufre. No puede haber felicidad en la crueldad.
-Triste y llena de conocimientos, porque por un lado he sentido pena por los seres vivos que sufren por culpa de otros seres vivos, y por otro lado, porque he aprendido muchísimas cosas, no solo sobre la crueldad, sino también sobre dilemas.
-Triste, porque hay crueldad sin que muchas veces se sepa y, también, enfado porque no se aprende que se pueden poner soluciones sin llegar a crear conflictos de cualquier tipo.
-Alegre y triste, alegre porque me lo he pasado muy bien, me he reído mucho y triste porque había mucha maldad.
-Triste, porque pegar es cruel, meterse con la gente es cruel, matar por diversión es cruel, y nunca puede estar justificado estas cosas.
Estos talleres se llevan a cabo en colaboración con ESPACIO ESPIRAL
Lindo taller Esther, muy pedagógico y enfocando la crueldad con la empatía, genial me parece! porque nuestros niños están expuestos a la crueldad, está frente a ellos y muchos la viven en sus relaciones, pienso que talleres como estos les dan a los niños herramientas para enfrentar estos retos que pone la sociedad y nosotros como padres debemos ahondar mas en el tema, explorar como ven ellos las relaciones de los demas, en su escuela, sus grupos para poder dialogar sobre como ellos lo van viviendo y trabajando.